• La delegación bogotana se encarga de agregarle ritmo a la competencia de actividades subacuáticas en playa blanca.

San Antero, 28 de octubre de 2021. Cuando se trata de deporte y los IV Juegos Nacionales de Mar y Playa, la palabra clave es la unión. Y si hay algo que la identifique es el bombo, que atrae música, cultura, colores e identidad.
 
Ese es el propósito de la delegación de Bogotá, que con este elemento sonoro le da un toque de fraternidad al evento multideportivo, en el que se compite en la arena y el agua, pero en la tribuna se disfruta a una sola voz.  
 
"Nosotros buscamos tener un mensaje en el que todos animemos nuestros colores, que no exista la rivalidad y reine lo contrario, la competencia sana entre todos los que hacemos parte de los Juegos”, asegura Jaime Roa, psicólogo de la delegación capitalina, quien en sus tiempos libres es el encargado oficial del bombo.
 
“Esta tierra es música, a nosotros también nos gusta y es una manera de animar a los deportistas que tenemos acá, afianzando el proceso y el sentido de pertenencia”, recalcó.
 
El bombo no deja de sonar, mientras las competencias se desarrollan bajo el agua. Su intensidad aumenta y la tribuna lo disfruta. Es motivación extra para los atletas que lo dejan todo en el mar.  
 
"Nuestro propósito es darle energía a la delegación de Bogotá y de paso a todos, al final somos una familia. Desde muy temprano nos programamos para darla toda acá”, explica Julian Murcia, profesional en el área de recreación.
 
Bandera, papelillos, cornetas, amor por la región y mucho color, son algunos de los protagonistas en San Antero y playa blanca. La competencia sigue y mientras ella no pare, el bombo continuará retumbando.